Vamos a vender unas camiseticas....
El mercadeo deportivo en Colombia es una practica que pocos equipos practican de una manera adecuada. En El Tiempo publicaron un articulo sobre lo que representa la venta de las camisetas para los equipos colombianos y realmente quede sorprendido con las respuestas de personajes iconos dentro de la escena local.
Gabriel Camargo, senador de la república y presidente del Deportes Tolima, afirma que ese negocio no es tan redondo para sus arcas. "No vendemos nada. Esas camisetas se las compran a Sheffi, firma encargada de diseñar los uniformes, y nosotros no recibimos nada de ese ingreso. Ellos solo nos dan los uniformes a nosotros".
Esta frase refleja una clara radiografía de lo que es el negocio del fútbol en el país. Para los dueños de los equipos en Colombia la única manera de cuadrar caja es con la venta de jugadores, como si fuera una trata de blancas; son muy pocos los que ven el manejo administratativo de los mismos como cualquier otra empresa en donde, a través de una buena estrategia de mercadeo impulsen las ventas de boletas, merchandising, posicionamiento de marca, servicio al cliente, etc..
La multinacional Adidas ha sido de las pocas marcas que le ha apostado a este mercado y según los datos que aparecen en el articulo del diario, han generado un impulso en las ventas del equipo azul de la capital que antes no lograba con su previo proveedor, Saeta. Unos números que, si bien es cierto que el numero de aficionados de Millonarios es uno de los mas cuantiosos entre todas las hinchadas de Colombia, haría que los directivos de otros equipos piensen en ver como hacer para empezar a impulsar este tema dentro de sus gestiones.
Ojala ejemplos como estos hagan reflexionar y muestren el camino ha seguir para esos gamonales del fútbol que SI existe otra alternativa diferente para generar ingresos y dejen de este deporte una mafia unipersonal y comiencen a manejar sus escuadras como una verdadera empresa. En el momento que se haga esa transición les aseguro que el deporte y los jugadores colombianos van a ver el cambio.
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